Imagina tener un Pub en Irlanda y verte obligado a colgar el cartel de “Agotado”. Sería todo un fracaso como empresario.
Con el fin de promover una gestión íntegra y con capacidad predictiva, desde ITM Platform, aparte de ofrecerte probar nuestra plataforma de manera gratuita, te queremos mostrar varias claves para una gestión de proyecto exitosa.
A continuación intentaremos ilustrar, con la ayuda de San Patricio, varios de los principales puntos a tratar para evitar errores en nuestra gestión de proyectos:
Definición: debemos tener claro nuestro objetivo final y no ponernos a trabajar “como gallinas sin cabeza”. Un objetivo debe ser específico, medible, alcanzable, orientado a resultados y con fecha límite en su ejecución.
A pesar de que San Patricio se hizo famoso por exterminar a las serpientes de Irlanda, su objetivo final nunca fue un trabajo de exterminación. Su misión en Irlanda siempre consistió en la promoción del cristianismo.
Planificación y requisitos: ¿Cómo sabemos que vamos por el buen camino?,¿En cuánto tiempo debemos recorrer dicho camino? Todo paso o requisito que nos lleve a nuestra meta final debe ser medible y observable.
Si volvemos a pensar en el caso de San Patricio, éste seguramente se dedicó a recorrer la Isla reclutando creyentes, ¿Cuántos creyentes debía convertir en qué unidad de tiempo para saber si estaba alcanzando los pequeños objetivos que le ayudarían a conseguir su meta final? ¿10 conversiones al día?
Este método sería adecuado pues se establecen los tiempos y se operativizan cada uno de los pasos de tal manera que se puede saber exactamente cuándo son alcanzados. Un objetivo final debe verse como la cima de una larga escalera, antes de llegar a él se deben subir cada uno de los escalones anteriores; se deben cumplir unos requisitos o pasos planificados con antelación.
Análisis de mercado: Si algo hizo bien San Patricio fue el análisis de mercado. Se sumergió entre la población irlandesa y llegó a conocer los problemas y preocupaciones de la gente. Decidió que las serpientes era uno de sus mayores problemas y planeó deshacerse de ellas.
Comunicación: fundamental para evitar malos entendidos y captar futuros clientes.
Tras encontrar un punto de partida como fruto del análisis de mercado, San Patricio, decidió iniciar una campaña informativa en la que estableció una dura fecha límite para todos sus potenciales conversos. Estos fueron citados frente a la costa para ver cómo las serpientes se subían al barco y partían.
Análisis de riesgos: Dado que todo lo explicado anteriormente no es más que una forma divertida de ver la gestión de proyectos, no debemos olvidarnos de realizar siempre un análisis de riesgos. Esto nos permitirá conocer con antelación nuestros puntos débiles y elaborar diversos planes de contingencia para los mismos.
No todos tenemos la suerte de San Patricio.